Ventajas de aplicar la escala Likert en tu tesis

¿Cómo elegir la mejor? ¿Es posible aprovechar los beneficios de la escala valorativa Likert o sus variantes en tesis de otros campos, como la medicina?

¿Qué es la escala de Likert?

También conocida como método de evaluaciones sumarias, la escala Likert original fue propuesta en el año 1932 por el psicólogo Rensis Likert para poder cuantificar aspectos psicométricos con el uso de una encuesta.

Cuando se habla de la escala Likert se hace referencia a la original, en la que el encuestado expresa su grado de acuerdo o desacuerdo con una afirmación. Se eligen entre 5 posibles respuestas y entendiendo que la diferencia entre una contestación y otra adyacente es siempre la misma.

Las posibles respuestas a las preguntas o afirmaciones en la escala Likert original son: completamente de acuerdo, de acuerdo, neutro, en desacuerdo, completamente en desacuerdo.

Al establecer la equidistancia entre dos pares de respuestas contiguas, se puede hacer corresponder cada una de ellas con un valor numérico para proceder a trabajar los datos con la estadística y el análisis cuantitativo. También se abre la posibilidad al empleo de gráficas que permiten asimilar la información con rapidez, de manera visual.

Tipos de escala Likert

En la actualidad se usa el instrumento que supone la escala Likert en diferentes versiones o tipos, donde se incluyen más o menos respuestas o grados. Conservando la condición de ser las respuestas siempre equidistantes con sus anteriores o sucesivas.

El ejemplo de escala Likert aplicado en Medicina más común lo vemos cuando un médico le pide al paciente que califique la intensidad de su dolor en una escala de 0 a 10.

Las escalas tipo Likert que comparten el mismo número y tipo de respuestas se aplican a grupos de estudio, de ahí su uso en Sociología. Tiene la ventaja de permitir la suma de respuestas en muestras de estudio, y por eso también se las conoce como escalas sumativas.

Se suele recomendar que exista un valor medio completamente simétrico en la escala para facilitar el manejo de los datos y las respuestas de los encuestados, aunque no es obligatorio.

El modelo de encuesta con la escala Likert modificada que veíamos en el caso de la evaluación de la intensidad del dolor en los pacientes. Éstos aquejados de una misma enfermedad sería un caso con un valor central simétrico, que se corresponde con el 5. Aunque, continuando con los estudios clínicos, el dolor no es el mejor ejemplo porque hay variaciones en la tolerancia de un paciente a otro, que obligan a tratar los datos con más prudencia que cuando se manejan escalas obtenidas en pruebas diagnósticas.

En todo caso, el tipo de análisis de datos que es mejor aplicar una vez disponemos de todas las encuestas depende de cómo se haya presentado la escala Likert o alguna de sus variantes durante la realización del estudio.

Ventajas de su aplicación en una tesis doctoral

La principal ventaja es la posibilidad de tratar numéricamente valores no medibles de manera precisa, evitando los sesgos que suelen darse en las respuestas de tipo sí/no. Además, estas encuestas son sencillas para los participantes y no dejan de ser una manera barata de recopilar datos para una tesis doctoral. Sobre todo si hacemos una comparación con las mediciones obtenidas en laboratorios o en ciertas pruebas clínicas.

Pero también debes tener presente que la aplicación de este tipo de encuestas al comienzo o al finalizar tu tesis. Por ejemplo, cuando propones un nuevo método para la industria alimentaria e incluyes respuestas de consumidores. O, mejor, de catadores profesionales, deja abierta la posibilidad a una mejora, un pulido del proceso inicial: “en primer lugar, probamos a desodorizar el aceite de X sometiéndolo a estas condiciones, pero no conseguíamos igualar las propiedades organolépticas del método empleado de manera habitual hasta el momento, más costoso, por lo que introdujimos la modificación Z y, entonces sí, dimos con el proceso que presentamos como mejor alternativa”. Este sería un ejemplo de una tesis en la que se recomienda un método alternativo y se podría aplicar de paso el método retrospectivo.

La escala Likert se usa para cuantificar aspectos que no son numéricos, y así tratarlos con herramientas de análisis y estadística, evitando los problemas asociados a las encuestas del tipo sí o no. No es un método perfecto, pues encuestados con respuestas diferentes pueden aportar un sumatorio final igual, por eso es muy importante elegir de manera correcta cómo se van a tratar los datos numéricos para llegar a los resultados más fiables.

Estas escalas se pueden incluir en tesis doctorales casi de cualquier material, dependiendo del objeto de estudio, pues pueden ser la clave para respaldar nuestra tesis cuando se trata de una propuesta de mejora. También son muy útiles en algunos estudios clínicos.